Cada parque temático tiene su historia, y Disneyland tiene una muy curiosa que muy poca gente conoce. Owen y Dolly Pope, un matrimonio estadounidense, estuvo más de una década viviendo dentro del parque sin que los visitantes se percatasen.
Según informa Xataka, la historia se remonta a la década de los 50. La pareja se dedicaba entonces a la realización de espectáculos por California y su actividad despertó el interés de Harper Goff, uno de los empleados importantes de Disney, que no dudó en comentarle a Walt Disney que se pusiera en contacto con ellos.
La empresa de dibujos animados no pasaba para nada por su mejor momento. Estaba en crisis y tuvo que buscar alternativas para sobrevivir, y fue en ese momento cuando nació la idea de crear un parque temático. Owen y Dolly Pope estarían dentro del proyecto, y en 1950 fueron contratados para realizar sus espectáculos allí, al tiempo que organizarían la actividad de los caballos.
Así, se mudaron a Burbank, donde una autocaravana sería su vivienda. Sólo tres días antes de la apertura oficial, la empresa les ofreció una casa dentro del propio parque. Y allí se quedaron durante los siguientes 15 años, realizando sus shows, al cargo de los caballos, e incluso construyendo establos, arneses y aparejos. Estaban a la vista de todo el mundo, pero sin que nadie supiera que eran unos simples trabajadores que tenían el “placer” de vivir en Disney.
No fue hasta 1971, con la construcción del nuevo parque en Orlando, cuando se mudarían a Florida para encargarse de supervisar la construcción del área de Fort Wilderness Resort. Sólo cuatro años después, en 1975, se retiraron de sus labores.
Durante un tiempo, la casa de los Pope quedó abandonada, hasta que se restauró y se decoró para que los visitantes conocieran la vida de estos trabajadores. Años después fue transportada a una zona cercana al parque, y su espacio original ahora lo ocupa el megaparque de Star Wars.
