Conoce la razón por la cual Forbes, la revista especializada en el mundo de los negocios y las finanzas, comparó a esta ciudad de América con la potencia de Dubái.
Dubái es uno de los siete emiratos que conforman los Emiratos Árabes Unidos, cuya capital es la ciudad homónima. Debido a su ubicación geográfica, sus políticas fiscales flexibles a la inversión extranjera y su industria de construcción e inmobiliaria, la ciudad de Dubái se ha consolidado como una de las más ejemplares. ¿Qué ciudad de América podría compararse con ella? AQUÍ te lo contamos.
Panamá: ¿dónde queda y en qué está basada su economía?
Panamá, que tiene como capital a la ciudad de nombre homónimo, es un país ubicado en Centroamérica, en una franja que une a América del Sur con América Central.
Su territorio es solo interrumpido por la cuenca del canal de Panamá, de 80 km, que une al mar del Caribe con el Pacífico. Este ha permitido el paso de hasta 750.000 buques, convirtiéndose en una ruta importante para el comercio global, que da ganancias de hasta 1.000 millones de euros al año.
Asimismo, esta ciudad ofrece amplia plataforma de servicios marítimos, comerciales, inmobiliarios y financieros, teniendo como una de las zonas francas más relevantes a la zona libre de Colón, la cual ocupa 1.064,58 hectáreas que viene a ser la más grande del continente americano y la segunda del mundo.
¿Por qué a Panamá se le llama la “Dubái de Latinoamérica”?
De acuerdo al medio Forbes, la ciudad de Panamá tiene ese sobrenombre porque ha demostrado en 15 años uno de los mayores crecimientos económicos del mundo. “Panamá es conocido como “El Dubái de América”, gracias a que es una ciudad que está creciendo de manera masiva”.
Además de ser la capital financiera de Latinoamérica, de no poseer Banco Central y que cuenta con más de 90 bancos —el triple de los que hay en España—, en Panamá pueden verse enormes rascacielos como en Dubái y, como mencionamos previamente, dispone de zonas de libre comercio.
“Este destino está lleno de contrastes, en él podrás encontrar desde calles populares, hasta los restaurantes más sofisticados, de hoteles de diseño a manicuras justo en medio de la calle. Sin duda, un espectáculo sublime para la vista”, explica el medio.
