Santa María de Coromoto

Patrona de Venezuela, de la Diócesis de Punto Fijo y, desde el 19 de noviembre de 2011, Patrona Principal de la Arquidiocesis de Caracas, luego que la Santa Sede aprobara su designación.


Advocación mariana, venerada en Guanare, capital del Estado Portuguesa de Venezuela, en el sitio donde apareció, hace 367 años, dejando su Santa Imagen al Cacique de la Tribu los Cospes, llamado Coromoto. Esta Santa Imagen, que mide 2,5 centímetros de alto por 2 centímetros de ancho, está expuesta para su veneración en la Basílica Menor Santuario Nacional de Nuestra Señora de Coromoto, construido en el sitio de la segunda aparición.

En 1591, cuando Guanare fue fundada,  los indígenas que habitaban la región, los Cospes, huyeron hacia la selva al norte de la ciudad. Esto dificultaba la evangelización emprendida por la iglesia católica. Un día de 1652, el cacique Coromoto y su mujer atravesaban una corriente de agua y vieron una dama de extraordinaria belleza que les dijo en su idioma: “Vayan a casa de los blancos y pídanle que les eche el agua en la cabeza (el bautismo) para poder ir al cielo”. Casualmente, un español llamado Juan Sánchez pasó por ahí y el cacique Coromoto le relató lo sucedido. Juan Sánchez pidió que se alistara con la tribu a fin de enseñarles lo necesario para echarles el agua del bautismo. Los indígenas marcharon con él a un ángulo formado entre los ríos Guanaguanare y Tucupido, donde les repartieron tierras e iniciaron la catequización.

Varios de los indios recibieron el bautismo, no así el cacique quien echaba de menos la selva donde él mandaba y no tenía que obedecer. Sin embargo, el sábado 8 de septiembre de 1652, la virgen volvió a aparecer en el bohío, en presencia de Coromoto, su mujer, su cuñada Isabel y un sobrino de esta, “siendo la única vez que la Santa Virgen aparece a una familia”. El cacique tomó una flecha y apuntó para matarla, la virgen María se le acercó, Coromoto soltó la flecha e intentó empujarla, pero ella desapareció dejándole en la mano un pequeño pergamino con su imagen. El niño corrió a avisarle a Juan Sánchez, quien con dos de sus compañeros fueron al sitio de la aparición y recogieron la preciosa reliquia. Dieron parte a las autoridades civiles y eclesiásticas, quienes a pesar de no creerlo resolvieron llevar el pergamino a la Iglesia de Guanare, en 1654, donde permaneció en un relicario hasta 1987, cuando fue incrustada en el pedestal de la imagen de madera, en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Coromoto, construido en el lugar de esta segunda aparición, cerca de Guanare, consagrado el 7 de enero de 1996, e inaugurado con solemne Eucaristía presidida por su Santidad el Papa Juan Pablo II, el 10 de febrero de 1996.

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