Jardín Botánico de Montreal – Canadá
Está situado en el parque Maisonneuve de la ciudad, que forma parte del distrito de museos Space For Life. Contiene diez invernaderos y 30 jardines temáticos. Además ha albergado esculturas vegetales gigantes y triposas con forma de animales, como parte de la exposición “Mosaiculture” del festival de Montreal.
Jardín Botánico de Río de Janeiro – Brasil
Se encuentra justo debajo del Cristo Redentor, a los pies del Corcovado, es patrimonio de la UNESCO. Ofrece una experiencia de selva tropical en el corazón de la ciudad, con monos, palmeras y más de 140 especies de aves exóticas. Aunque hay conservatorios y áreas curadas, sólo el 40 por ciento de las plantas aquí son cultivadas, con el resto del espacio poblado por vegetación natural y bosque orgánico de la montaña.
Brooklyn Botanic Garden – New York, EE.UU.
Cuenta con miles de especies de plantas, distribuidos en 52 acres de extensión. Cada primavera, en el Festival Sakura Matsuri florecen más de 70 árboles a lo largo de la Explanada de los Cerezos. Pero también hay lugares muy tranquilos, como el Jardín de la Colina y el Estanque Japonés (primer jardín de inspiración japonesa construido en Estados Unidos) y el Jardín de Shakespeare, repleto de plantas, como la prímula y los azafranes.
Jardín Botánico Joaquin Antonio Uribe – Medellín, Colombia
Cuenta con más de 4.500 flores y 139 especies de aves, pero la parte más impresionante es el Orquideorama. Es un arco hexagonal de acero que semeja una colmena gigante y ayuda a recoger el agua para redistribuirla a los jardines de orquídeas que hay debajo. La Feria de las Flores, que se celebra anualmente en Medellín en agosto, es el momento en el que el jardín botánico organiza una impresionante exposición de artesanía floral.
Desert Botanical Garden of Phoenix – Arizona, EE.UU.
El Jardín Botánico del Desierto, de 140 acres, tiene una vista espectacular y alberga la mayor colección de plantas desérticas al aire libre del mundo, además es el hogar soleado de una extraordinaria cantidad de criaturas vivas, sólo hay que saber detectarlas. El mejor momento para intentar verlas es cuando se pone el sol.