Las siete maravillas de Rusia

Aunque Rusia es el país más grande del mundo, han sido capaces de resumir sus monumentos y lugares de interés en esta lista de Siete Maravillas.


Rusia es un país tan vasto y tan inmenso, de hecho es el más grande del mundo en extensión y con casi más del doble de kilómetros cuadrados que el segundo en la lista, que se me antoja una ardua tarea elegir cuáles son los mejores lugares del país y reducir esa lista a siete. Pero eso hicieron años atrás, a través de una votación popular, eligiendo siete lugares como las Siete Maravillas de Rusia, que a continuación te damos a conocer.

Catedral de San Basilio en Moscú

Si hubiera que elegir un monumento que identificara a toda Rusia, lo más seguro y probable que la elección fuera en la mayoría de los casos la Catedral de San Basilio o, en su defecto, sus coloridas cúpulas en forma de bulbo . Aunque Moscú tiene un montón de catedrales, ésta que está consagrada a San Basilio, y construida sobre la tumba de este santo en plena Plaza Roja, es la más famosa y reconocible aunque no es la sede principal de la iglesia ortodoxa en la capital rusa. Se levantó a mediados del siglo XVI, en tiempos de Iván el Terrible, del que se dice que dejó ciego al arquitecto que la proyectó para que nunca volviera a hacer algo tan bello, leyenda que está probada que no fue tal pero que aún así perdura en el tiempo.

Lago Baikal

Situado en Siberia, diríamos que es un lago récord. Para empezar, se le señala como el primer lago que hubo en la Tierra. Es en extensión el lago más grande del continente asiático y ocupa el quinto lugar en esa lista a nivel mundial. Aparte hay que señalar que está considerado como el lago más profundo del mundo, ya que supera los 1500 metros de profundidad en algunas lugares. Y así las cosas, al ser tan y grande y tan profundo, la gran cantidad de agua que tiene es la mayor reserva de agua dulce del mundo. En el año 1996, la UNESCO lo incluyó en la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Mamayev Kurgan

La Batalla de Staligrando es uno de los episodios más famosos de la Segunda Guerra Mundial en el frente ruso, y la lucha por hacerse con el control de la colina Mamayev Kurgan dejó un enorme número de víctimas. Hoy día, en esa colina desde que la que se vislumbra toda la ciudad que en la actualidad recibe el nombre de Volvogrado, se rinde homenaje a la victoria del ejército soviético en esa batalla, destacando sobre todo la escultura llamada Madre Patria. El monumento, que en su día fue la estatua más grande del mundo con 85 metros de altura, más allá de ser un lugar icónico , impresiona.

Valle de los Géiseres

La Reserva Natural de Kronotski es un área natural que se encuentra en la península de Kamtchatka y que fue añadida como Patrimonio de la Humanidad, junto a otros parques del entorno, dentro de la categoría de Volcanes de Kamtchatka. Si bien, lo que ahora nos ocupa no son los volcanes sino otro fenómeno geológico poco habitual: los géiseres. En el llamado Valle de los Géiseres se encuentra la segunda mayor concentración de estas fuentes de aguas termales, casi un centenar de ellos, que los turistas pueden vislumbrar desde el aire, en excursiones en helicóptero.

Formaciones rocosas de Mam-Pupu-Nyor

Nos situamos en una región llamada República del Komi y dentro de un parque natural, el de Pechora-Illich, que también está protegido por el Patrimonio de la Humanidad debido a sus bosques vírgenes. Si bien, lo que nos ocupa ahora es un lugar desprovisto de vegetación, una montaña llamada Mam-Pupu-Nyor y en la que se destacan siete grandes figuras de piedra, siete monolitos naturales de gran tamaño (por encima de los 30 metros de altura) que reciben el nombre de los Siete Hombres Fuertes o simplemente los Siete Gigantes, que para los mansi, los indígenas de la zona, son figuras sagradas.

Palacio Peterhof de San Petersburgo

El Centro Histórico de la ciudad de San Petersburgo está reconocido como Patrimonio de la Humanidad, y el principal monumento es el llamado Palacio Peterhof. Construido a principios del siglo XVIII bajo mandato de Pedro I, que decidió crear una nueva ciudad para establecer en ella su capital, fue desde su origen la residencia de los zares hasta 1918, tras la revolución que derrocó este régimen de gobierno, que pasó a ser un museo y en la actualidad una gran atracción turística. Amén del gran palacio, el conjunto lo forman otros palacios menores y unos enormes jardines estilo Versalles.

Monte Elbrús

Si por el este los Montes Urales marcan la frontera entre Europa y Asia, por el sur la cordillera de las montañas del Cáucaso hacen la misma función, amén de frontera real entre Rusia y Georgia. En territorio ruso, y por tanto dentro de Europa, se encuentra el Monte Elbrús, que con sus 5624 metros de altura es la cima más alta del viejo continente, lo que lo convierte en un lugar de culto para alpinistas y escaladores pese a sus nieves perpetuas y las tremendas ventiscas, por lo que sólo es recomendable intentarlo durante un momento concreto del verano.

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