Por qué Samaná es el secreto mejor guardado de la República Dominicana

Samaná, un paraíso natural donde cultura e historia se mezclan con un paisaje natural donde ballenas y lujosos hoteles permiten descansar y relajarse.

En la costa norte de la República Dominicana se localiza la península de Samaná, un paraíso natural donde la cultura y la historia se funden con impresionantes espacios naturales. Al tratarse de un destino exclusivo y no masificado, aquellos que realizan el viaje a Samaná se ven envueltos en un lugar de ensueño que guarda innumerables secretos, ya que es una de las escasas zonas no masificadas de la región caribeña.

Los planes más habituales suelen involucrar las diversas playas vírgenes de Samaná, una naturaleza salvaje que quita el aliento, ballenas y lujosos hoteles donde descansar y relajarse durante unas espectaculares vacaciones.

Qué convierte a Samaná en un destino inigualable

1. Destino no masificado

Samaná es uno de esos lugares que enamoran a simple vista por la belleza de sus paisajes. Su exuberante vegetación abraza a las increíbles playas vírgenes de aguas turquesas y arena blanca que se encuentran en la zona. Un ejemplo es la Playa Rincón, una de las diez playas más bellas del mundo según la UNESCO y a la que solo es posible acceder andando, a caballo o en barco, convirtiéndola en un espacio de ensueño donde reina la paz.

Las diversas excursiones a caballo recorren no solo la playa, sino que se adentran entre la espesa vegetación ofreciendo una experiencia sin igual. Esta playa es perfecta para la práctica de deportes acuáticos como el snorkel o el windsurf. Sin embargo, Samaná también cuenta con historias sorprendentes, como la de los piratas y bucaneros del Caribe que se refugiaban en sus playas en busca de lugares secretos donde esconder los tesoros robados a los galeones portugueses y españoles.

2. Naturaleza en estado puro

En esta zona tan especial de República Dominicana es posible realizar diversas actividades que permiten sintonizar y contemplar las maravillas que esta alberga. Si el viaje a Samaná coincide con los primeros meses del año (15 de enero-20 de marzo), tendrás la oportunidad de vislumbrar a las miles de ballenas jorobadas que se reúnen en sus aguas para realizar uno de los rituales de apareamiento más espectaculares del mundo.

Aunque esta sea la actividad principal de todo visitante, el maravilloso Parque Nacional Los Haitises es de obligada visita. Con una dimensión de 1375 km2, este parque formado hace cerca de dos millones de años alberga un inmenso bosque subtropical, una protegida fauna y flora y numerosos manglares y cuevas de enorme relevancia arqueológica. En plena Sierra de Samaná se localiza el Salto El Limón, una impresionante cascada de más 40 metros, únicamente accesible a pie o a caballo.

3. Encantadores hoteles

A pesar de no sufrir las masificaciones de turistas, la península de Samaná cuenta con varios alojamientos y hoteles pensados para ofrecer los mejores servicios a los visitantes. Uno de ellos es el hotel Grand Bahia Principe Cayacoa, situado en la Bahía de Sanamá, en plena ciudad de Santa Bárbara. En una zona tranquila en la que poder relajarse cómodamente, este hotel todo incluido ofrece diversos servicios, como clases y cursos de varios deportes acuáticos. Desde el recinto del hotel es posible tener una vista privilegiada de los famosos Puentes de Samaná en la Bahía (Cayo Linares y Cayo Vigía), a los que se accede a través del Malecón que la bordea.

Fuente: porconocer.com

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