Bolivia: Tres atractivos arqueológicos de Tiahuanaco

¿Ya conoces de las pirámides de Akapana o Monolito de Ponce? Todas estas maravillas históricas quedan en el país y son maravillosas para conocer. 

Cerca del lago Titicaca, quedan ubicadas muchas maravillas arqueológicas que son dignas de visitar; si estás cansado de la rutina, puede ser un plan ideal para un fin de semana por su cercanía a La Paz. ¿Te animas?

Por ejemplo, desde La Paz, en el Terminal Terrestre hay buses que salen cada media hora desde la calle José María Asín, preciso en la zona del cementerio de La Paz. Es un viaje corto, por eso es ideal organizar bien tu tiempo, el trayecto hasta Tiahuanaco es de hora y media.

Tiahuanaco es un lugar que se puede visitar en un día, pero si vas en 'plan romántico' quedarse a dormir en los 'pueblitos' para continuar con el paseo al día siguiente es ideal, las opciones de hospedaje más chéveres son los hostels y alojamientos que están ubicadas muy cerca de las ruinas, y es toda una experiencia. ¡No son muy costosos!

Pirámide de Akapana

La Akapana era una pirámide de 800 m. de perímetro y 18 m. de altura formada por 7 terrazas escalonadas. En la parte superior había edificaciones destinadas a los cultos religiosos y a la astrología. Para la construcción se utilizaron diferentes técnicas por lo cual se presume que fue mucho el tiempo que se demoró en levantarse, y hasta ahora es un misterio.

El Monolito de Ponce

El Monolito de Ponce lleva el nombre del arqueólogo boliviano Carlos Ponce que lo descubrió en el año 1957. Es una de las figuras mejor logradas y conservadas de todo Tiahuanaco. La figura humana en sus manos sostiene un kero, vaso sagrado, y además se destaca las figuras de animales como el pumas, cóndores y águilas.

Kalasasaya

Kalasasaya o Templo de las Piedra Paradas, tiene un diseño exacto vinculado con la astrología, desde este sitio se verificaban con la duración del año solar y el cambio de cada estación.

En ambos equinoccios, que se da en las dos estaciones, otoño: 21 de marzo y primavera: 21 de septiembre, el Sol nacía por el centro de la puerta principal de ingreso.

Mientras que durante el solsticio de invierno; 21 de junio, el Sol nacía en el ángulo murario, en dirección Norte-Este. En el solsticio de verano: 21 de diciembre, se marcaba por el nacimiento del Sol en el ángulo murario, mirando al Sur- Este. Lo sorprendente es la exactitud, que es un ejemplo del avance científico y técnico de la cultura Tiahuanaco.

bolivia.com

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